El llamado de atención y la autocrítica de la Secretaría de la Mujer tras el femicidio de Noelia Albornoz

Tras la muerte de la joven a manos de su propia pareja, autoridades y organismo salieron a repudiar el hecho. Más allá de los cambios que se fueron dando en la fuerza de seguridad, sigue en discusión la formación.

Este viernes, la provincia se La Rioja se vio conmocionada por un femicidio ocurrido alrededor de las 20 horas en el barrio Urbano 41. En una vivienda de la zona, Marcos Suasnada mató de un disparo a su pareja y luego se quitó la vida.

Ambos, eran miembros de la Policia local.

A raíz del aberrante suceso, autoridades de la Secretaría de la Mujer y Diversidad salieron a pronunciarse mediante un comunicado, con un fuerte llamado de atención a la ministra Gabriela Asís y a la Iglesia.

El comunicado

FEMICIDIO DE NOELIA ALBORNOZ 
Lamentablemente, iniciamos el año con un femicidio. Tenemos una mujer, víctima de la violencia machista extrema, del abuso de poder, y de la letalidad del uso de armas de fuego. A Noelia Albornoz la mató el femicida Marcos Rubén Suasnada, ambos eran parte de la policía.
 La violencia por razones de género es un problema estructural que también atraviesa a las fuerzas de seguridad y es por ello que debemos de profundizar, sobre el cambio de paradigma. 
Implica revisar patrones culturales y de discriminación para no vulnerar sino garantizar derechos humanos. Debemos entender, que hay factores de riesgo que predicen que las mujeres están en grave peligro. A la vez que sabiendo que las armas de fuego, de las fuerzas de seguridad, no son para el uso personal, se hace necesaria ahí una revisión urgente, y creemos que ese es el compromiso de la Ministra de Seguridad, Justicia y DD HH Gabriela Asís.
 Asimismo, así como nos cabe la responsabilidad como Estado de trabajar en la lucha contra las violencias, también se hace necesario que instituciones, como algunas voces eclesiásticas, cuyos discursos llegan a miles de personas, apelen al cuidado y no a la destrucción de la vida de mujeres, porque nos atraviesa una situación grave y de emergencia; y no estar de acuerdo ideológicamente, no nos habilita a los discursos de odios. Deberían en todo caso contribuir a salvaguardar la vida y no reatroalimentar discursos misóginos que responsabiliza a las mujeres de un problema estructural, económico, político y social.
Para trabajar contra la violencia estructural es necesario hacerlo de manera colectiva porque la violencia en todas sus formas afecta el bienestar de las mujeres, disidencias, niñas, niños y adolescentes.